Descoser la ficción. Círculo de Actrices

Por Yuly Moscosa Hernández

…con las voces de  todas empiezo a escribir.

Desde febrero hasta mayo nos estuvimos encontrando cada dos semanas en el “Círculo de actrices” guiado por Jessica Valenzuela y conformado por Sayuri Navarro, Paulina Cuiriz, Ana Castillo, Amy Lira, Ángeles Muñoz, Cynthia Bejarano, Eloisa Zapata, Erandini Alvarado, Ingrid Bravo , Melissa Zaragoza, Sol Ochoa, Susana Arocha y Valentina Freire. 

Y aunque no siempre estábamos todas, generamos un contenedor en donde depositamos anécdotas, preguntas, deseos, inquietudes, frustraciones. Hablábamos de todo lo que nos atravesaba, nos abrazamos desde la herida y nos acompañamos durante un par de horas.

Estuve pensando mucho sobre cómo abordar todo este mar de voces para plasmarlo aquí, en este escrito. No quisiera que ninguna de las palabras dichas se perdieran pero también es verdad que necesito decir y compartir lo que resonó en mí durante esos días.

“Ahora soy un manojo de nervios, 

el síndrome de la impostora me invade y no me siento

 suficiente para poder decir esto, así como cuando 

cuesta trabajo nombrarse actriz, así como cuando sientes

 que no puedes ser productora, madre, mujer, escenógrafa, etc porque solo necesitas ser actriz.” (Siempre empiezo así)

Descoser la ficción. Descosernos a nosotras mismas para bordarnos, para nombrarnos y abrazarnos desde la herida, para acompañarnos en el tránsito, para pronunciar con todas sus letras lo que no queremos, lo que no nos gusta porque somos actrices, pero somos humanas, mujeres, madres, hermanas, cuerpas, gritos, cantos. Y, parafraseando a Valentina: aunque vamos juntas, cada quien va viviendo su experiencia de manera distinta… Y está bien porque ésta soy, éstas somos y en el teatro esto voy/vamos a ser mi cuerpa, mis tristezas, mis enojos, mi nerviosismo, mi duelo, mi voz.

“Esta que soy yo, 

a esta que le pasan estas cosas está ahí. 

Yo no dejo de ser yo” 

        Lenina.

Conjuro sobre el “YO CREO”

Sesión del 22 de febrero 2022

Creo en las mujeres. 

Creo en los espacios de encuentro entre nosotras.

Creo en la potencia creativa y dadora de vida. 

Creo en un discurso muy profundo y honesto que surge en espacios entre mujeres. 

Creo de creación: yo creo espacios, espectáculos, piezas y creo de creer en todo eso que estoy haciendo ahora.

Creo en el poder que cada una tiene. Quiero creer y tener más confianza en lo que soy y tengo. 

Creo que los espacios de mujeres me permiten ser como soy. 

Creo, hoy por hoy, que el teatro se encuentra en un momento de ruptura. 

Constantemente hablábamos sobre la revolución amorosa, sobre el amor propio, sobre cómo habitamos los espacios para crear, ahora que estamos juntas, ahora que es más complicado no darnos cuenta de las violencias que existen en los procesos creativos, ahora que es necesario nombrarlas con todas sus letras.

¿Cuál es la revolución más amorosa? 

Sesión 5 de abril del 2022

M: Digo más veces que “no” cuando algo no me parece.

C: Aceptarme tal y como soy con mis ideas, mi postura política, mi postura en la vida. 

A: El proceso de perdonarme ha sido de mucho movimiento. Es una revolución que continúa y he resignificado algunas experiencias, me he resignificado a mi. Verme desde un lugar distinto.

NECESITAMOS ESPACIOS 

ESPACIO DE DESCANSO, DE ESPEJO…”  

Melissa Zaragoza

Crear espacios con amigas, compañeras, colegas, crear colectivas, redes, entre nosotras, no es sencillo. Incluso ahí  nos  encontramos con nuestras violencias hacia nosotras mismas al momento de trabajar. Pienso que necesitamos mucha autoreflexión y comunicación porque generamos espacios de confianza muy íntimos pero también muy frágiles. 

Aquí hay un devenir porque entonces se presenta la palabra “NO” y decirle que “no” a alguien por la simple y sencilla razón de no querer, en lo personal había sido imposible porque siempre se tiene que poder. Porque siempre hay que llevarse al límite de todo, hay que tronarse para sentir más la escena, para hacer más, “para triunfar”. Hay que cargarse de mucha humildad, tanta pero tanta humildad que entonces empezar a cobrar  o pedir que se cumplan los acuerdos no es pensable. Esto no es una justificación, esto fue parte de la educación y esto es lo que ya no quiero en mi vida. 

“No voy a dejar mi vida para ser actriz, 

no voy a dejar de cuidarme para ser actriz, 

no voy a ser una “monja del teatro” como le dijeron a mi 

amiga Josefina para ser actriz, 

no voy a dejar de lado mi salud para ser actriz

no voy a dejar que me insultes para ser actriz

 Todo lo que soy me acompaña.” 

Durante esos días de encuentro hablábamos sobre el teatro o a partir del teatro, de la actuación, pero todo siempre nos llevaba a la necesidad de humanizar nuestros espacios de creación, a abrir el espacio para hablar de nuestras cuerpas, dolencias, procesos personales, maternidades, de nuestros cansancios. 

“Las cosas que pasan por el cuerpo

deben ser nombradas”

Sayuri Navarro

¿Por qué es tan difícil nombrarnos/nombrarme actriz/actrices? 

Muchos años estuve diciendo que era actriz en formación porque sentía que el no tener una licenciatura en actuación o incluso hacer teatro de manera independiente no era suficiente para sentirme actriz profesional. Sin embargo, también pienso en la validación personal, en lo necesario que es aprender a reconocer en nosotras mismas las habilidades que tenemos para construir personajes, atmósferas, sonorizaciones, investigaciones, espacios, hacer producción, gestión, coordinar logística, entre otras actividades que realizamos para hacer teatro en los estados.

Creo que todo esto es un proceso que puede ser largo, corto, no importa, pero es un proceso que conlleva soltar muchas cosas y es doloroso, y al mismo tiempo, amoroso. De mucha paciencia consigo misma. Desde hace algunos meses he podido elegir hacer teatro con amigas o en espacios donde me siento cuidada, también he necesitado aceptar trabajos con gente que no conozco y eso me hace crear mi atmósfera de límites que todavía me cuesta mucho verbalizar. 

“Ojalá te pudiera prestar mis ojos

para que sepas como te miramos las otras”

Ana Castillo

Caminos de luz. 

Durante las sesiones creamos caminos de luz para todas ¿Cómo me hablaría a mi yo del pasado desde mi lugar del presente?. Brechas para nosotras, para nuestro andar, pronunciar los nombres de las otras que me inspiran, regalos y sueños que nos dábamos en cada sesión. 

En algunas ocasiones, participé en un diario que hicimos por whatsapp donde compartimos preguntas sobre diversos temas y durante el día respondíamos con escritos, notas de voz con los sonidos que nos acompañaban, etc. y  otra grupa donde el camino se hizo a partir de fotografías: lo que significaba ese momento para cada una.  La historia de dolor podía existir, pero también nombrarse más allá.

Pienso que  muchas veces le di las gracias al teatro por permitirme ser parte de él, viéndolo siempre como un espacio supremo, algo lejano que me permitía ser, que me permitía canalizar mi energía. Siempre viéndolo como algo más que me permitía comportarme de manera extra cotidiana o muy cotidiana, pero nunca reconociendo el esfuerzo y dedicación que yo entregaba/entrego. La autoexplotación que me generaba/genero por entregarle todo a tiempo a todxs. Las violencias que aceptaba/acepto hacia mi cuerpo, tanto de otros como de mi misma para “mi crecimiento actoral”.

Pongo las palabras en pasado y en presente porque me es necesario asumir que aún lo sigo haciendo.

En esta última intervención de mi ansiedad al escribir 

quiero decir que la odié pero que también la abracé, que

escribí a mi ritmo y fue muy lento.

Mi camino de luz hoy y todos los días, después de haber compartido este espacio con creadoras de diversas latitudes es:  tomar un espacio para pensar en como estoy, en qué necesito hoy, apapacharme, dejar que mi cuerpa se acomode como quiera, llorar cuando me siento frustrada, aceptar mi ritmo lento, no ignorar mi salud, decir lo que necesito decir, escuchar…

Yo ya no creo que el teatro me haya salvado. Creo que me salvé haciendo teatro con mis amigas, con personas que te enseñan desde el amor,  que te permiten aprender y crecer.